Hace un par de semanas, fuimos invitados a ver una obra de teatro estupenda. La misma trasciende del hecho teatral y penetra en nuestra historia social y personal (como no recordar el corralito en la Argentina). El argumento se basa en la venta de acciones preferentes por parte de los bancos a usuarios del sistema financiero que no lograban entender en qué consistía este tipo de inversión. Pero también la transformación de los empleados forzados a realizar ventas para cumplir con las metas establecidas por los empleadores. Hay manifiestos paralelismos entre España y Argentina en las violaciones a nuestros derechos como usuarios y consumidores y también en la defensa de nuestros derechos. Y este paralelismo se extiende a otros países.
Tomando como punto de partida la estafa de las acciones preferentes, “De Tiburones y otras rémoras” linkea a fraudes análogos, (“El Corralito” en Argentina, la “Burbuja Hipotecaria” en Estados Unidos, los paraísos fiscales, etc.) y habla, sobre todo, de la promiscuidad entre los poderes, de la connivencia corrupta entre gobiernos y empresas, los ajustes de sueldo y dignidad, del acoso laboral, el menoscabo a las mujeres, y de los aprendices de monstruos. La obra refleja la degradación de los valores éticos y de los derechos tan costosamente adquiridos, en pos de una “supuesta sobrevivencia” que nada tiene que ver con el hambre de la gente, sino con la insaciable sed de codicia de los poderosos.Recomendamos fervientemente esta obra, y ya sabrán seguramente en el futuro sobre alguna acción conjunta que realizaremos con esta estupenda troupe teatral.
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