La reflexión y el debate llevan claridad en los conceptos. Esa claridad muchas veces se conserva en el fuero interior. Pero muchos otras veces se transmite con sencillas palabras y es más fácil para muchos entender.
Nuestra dirigente, la Abogada Fernanda Lacey, Coordinadora de la Comisión de Usuarios del Enre, con mucha lucidez habló en diversos medios del lado B de la segmentación tarifaria.
Para entender; algunos conceptos previos.
La segmentación tarifaria (proceso de separación en niveles de la población en base a los ingresos familiares) luego de idas y vueltas creo tres niveles de usuarios según los ingresos familiares:
Nivel 1: Altos ingresos a quien se les cobra tarifa plena (sin subsidios).
Nivel 2: Bajo ingresos a quienes se le mantienen una proporción de subsidios.
Nivel 3: El intermedio entre Altos y Bajos ingresos, de ingresos medios, que se le mantiene una proporción de subsidios, pero menor a los subsidios que se mantiene al Nivel 2.
Pero luego aparece ese lado B, esa trampa al propio discurso, donde limita el alcance de gozar de ciertos subsidios (para niveles 2 y 3) Aparecen los topes de consumo subsidiado.
Para Nivel 2, de bajos ingresos; tope de consumo 350 kw/mes en electricidad y entre 50/70 metros cúbicos/mes de gas, según distribuidora y zona del país;
Para nivel 3, de ingresos medios; tope de consumo de 250 kw/mes en electricidad y entre 50/70 metros cúbicos/mes de gas, según distribuidora y zona del país;
Para niveles 2 y 3 el consumo subsidiado es hasta el tope detallado. Todo lo que se consuma por arriba de dicho tope (excedente) será facturado a tarifa plena, es decir, tarifa sin subsidio que se aplica al Nivel 1.
Por eso, si antes decíamos que los de menores ingresos e ingresos medios estaban parcialmente subsidiados; desde la aparición de los topes, ese subsidio parcial se recorta más todavía.
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